MARCHAS DE PALIO -I-

martes, 23 de octubre de 2012

LAS FLORES.

La flor, por su color y aroma, agrada los sentidos y es concebida como un símbolo del gozo espiritual.

Las flores naturales que adornan el altar y los santos significan alegría, fiesta, exultación piadosa. Son una forma de manifestar el gozo entre los cristianos llamados a participar en la Fiesta de Dios, en la Liturgia.


Las flores, por su belleza y fragancia, son un símbolo más que, usadas como exorno o como ofrenda, sirven para expresar nuestra fe, nuestra esperanza y nuestro amor.

Colocándolas con sobriedad y buen gusto, son un buen regalo y un precioso gesto de nuestra devoción a Jesús o a María.